domingo, 23 de enero de 2011

A la memoria de mi mi compañero y amigo Agustin Herbun


Con un micrófono en la mano,
Y con mucho amor a Sevilla
Hubo un periodista cofrade,
Que buscabas las noticias.

Lo hacia por las calles y plazas,
De esta ciudad bendita,
En cada rincón de una Iglesia,
En cada convento o capilla.

Llevaba un Pregón en sus labios,
Y en una pequeña cuartilla,
Mil versos del amor de poetas
En una oración sencilla.

Pregonero de la gloria,
por los pueblos de esta Villa,
por cada atril de una Iglesia,
Ponía su voz por la arista.

De nuestras hermandades,
el culto que se ofrecía
Y de la Semana Santa...
Siempre los siete días.

Tu voz fue una oración,
Cada vez que retransmitías,
Desde la calle o el balcón
Era una saeta sentida.

Compartimos muchas horas,
Casi veinticuatro de cada día
En las largas madrugadas
Buscando la luz del día.

Nunca tuviste la suerte,
Esa que merecías,
de emisora en emisora
Para contarnos la vida.

Tu vocación te llevaba,
Como buen periodista,
A recorrer nuestra ciudad,
Y contarnos lo que ocurría.

Presentador desinteresado,
En cada acto o cofradía,
En cada barrio sevillano,
Y siempre una poesía.

En cada salida un pregón,
En sus formas una homilía,
Dejando la palabra de Dios
Como cirineo de la armonía.

Hoy ya estas en la Gloria,
Buscando las noticias,
Y hoy la noticia era tu
Que te fuiste de Sevilla.
Autor: Carlos Valera